Arinze sobre el aborto

El cardenal Arinze acaba de hacer, durante su estancia en Estados Unidos, unas declaraciones que no han dejado a nadie indiferente. Y que se agradecen, porque se entienden meridianamente, van a lo esencial e inciden en una de las cuestiones claves de nuestro tiempo.

Preguntado sobre quienes afirman que “estoy personalmente en contra del aborto pero respeto la libertad de elección de los demás”, ha afirmado que sostener esto es lo mismo que decir que uno esta personalmente en contra de disparar contra los miembros del Congreso, pero que otros pueden hacerlo pues es su elección y ese derecho a elegir debe de ser respetado.

Y abundaba: “a los políticos que sostienen este argumento se les podría decir: eres congresista o senador, personalmente no estoy a favor de que os disparen a todos vosotros, pero si alguien quiere hacerlo tenemos que respetar su decisión. Pero que quede claro, personalmente no estoy a favor”. Bravo por Arinze y la sencillez con que desmonta la hipocresía.

Por cierto, al ser a continuación preguntado sobre los políticos abortistas que se acercan a recibir la comunión, ha respondido de nuevo a los periodistas con sencillez y claridad: “¿De verdad necesitáis un cardenal para que os responda a esto? Preguntad a cualquier niño que se esté preparando para la primera comunión sobre un político que vota a favor del asesinato de millones de niños por nacer y que insiste en que lo volvería a hacer y que como consecuencia de esto millones de niños son asesinados, que además dice que es un buen católico y que quiere recibir la comunión el Domingo. Os contestarán sin dudarlo. No necesitáis a un cardenal para que os responda esto”.

He hecho el experimento en casa y funciona. Aunque a veces se agradece que un cardenal confirme las opiniones de mis hijos.