¿Pero aún queda algún católico de izquierdas serio?

¿Pero aún queda algún católico de izquierdas serio?

Leo una entrevista a Fernando Vidal, sociólogo, en Paginasdigital.es. En ella hay apreciaciones muy verdaderas, como aquella sobre la inexistencia de la sociedad civil en España (que no es casual, por cierto), pero me encuentro con la siguiente afirmación:

 

En todo el planeta hay un importante papel para los cristianos en los partidos de izquierda no como corriente pero sí como espacio-puente público de creación y diálogo. En el Foro Social Mundial de Portoalegre, el 80% de los asistentes son personas religiosas. La mayoría del electorado del PSOE se declara cristiano -no así la mayoría de los cuadros del partido ni sus diputados-. Realmente el PSOE es una excepción española.

 

¿Se referirá al papel de los cristianos en el Partido Demócrata estadounidense, desacreditados por su líder, volcado en el apoyo a la abortista Planned Parenthood, y que incluso tienen que tragarse el sapo del mandato abortivo que tanto católicos como protestantes han recurrido por ilegítimo y totalitario?

 

¿O se referirá al papel de los cristianos en el Partido Socialista francés, vanguardia del homosexualismo político y de los ataques a la familia?

 

¿O, por salir del entorno occidental, se referirá Vidal al papel de los cristianos en el socialismo bolivariano, o mejor aún, en el socialismo real de países como China?

 

Lo cierto es que el papel de los cristianos en los partidos de izquierda ha pasado de un optimismo bastante infundado a una marginalidad cada vez mas patente.

 

Abandonadas las viejas reivindicaciones económicas, la izquierda se ha volcado en un programa libertario de acoso y derribo a todo lo que suene a tradicional, que de manera natural expulsa a cualquier cristiano serio. El único papel real que les queda a los pocos cristianos que en el mundo aún juegan a políticos de izquierda es el de tontos útiles, compañeros de viaje siempre dispuestos a justificar lo injustificable, a cambio de prebendas políticas y económicas.

 

Resulta curioso, no obstante, el empecinamiento de algunos, que han decidido que el ser de izquierdas y el ser cristiano a un tiempo es lo más natural del mundo, en negar la realidad. ¡Cuánto se echa de menos una menor dosis de apriorismo ideológico y un mayor realismo!

 

PD. Evidentemente, lo escrito hasta aquí no implica que la propuesta de muchos partidos que se titulan de derechas, centroderecha o cosas por el estilo sea asumible sin más por un cristiano consecuente. Lo contrario es lo más frecuente.

Escriba un Comentario

Your email address will not be published. Required fields are marked *

*

You may use these HTML tags and attributes: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <strike> <strong>