Capitalismo de amiguetes en Chile
Hablamos mucho de las maldades del “capitalismo global financiero neoliberal y sin entrañas”. Y es verdad que la actividad económica no debe ser autónoma: debe tener sus fines y respetar la dignidad de todos los hombres. Pero me da la impresión de que, entretenidos en esta denuncia, pasamos por alto algo muy concreto y real, que sucede cada día ante nuestros ojos, y cuyo impacto puede ser incluso mayor. Me refiero a lo que los anglosajones llaman “crony capitalism” y que podemos traducir como “capitalismo de amiguetes“.
El último ejemplo nos llega desde Chile. Allí, acaba de llegar a la presidencia la izquierdista Bachelet. Por fin una líder que trabajará por los pobres en Chile, ¿no es así como nos la presentan?
Pues resulta que ya ha empezado a tomar sus primeras medidas. Y con ese celo por los más desvalidos, Bachelet ha derogado una ley de defensa del consumidor que prohibía a los bancos subir comisiones sin comunicarlo previamente a los clientes. Así que gracias a esta izquierdista campeona de la inclusión, la igualdad y no se sabe cuántas cosas más, los banqueros chilenos ya pueden subirte las comisiones por sorpresa y sin posibilidad de réplica. ¡Qué gran avance social!
Un apunte: ¿Alguien cree que es casualidad que Jorge Awad, presidente de la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras de Chile haya contribuido generosamente a costear los gastos de la campaña presidencial de Bachelet?.