El pensamiento positivo te hace perezoso y te lleva al fracaso

El pensamiento positivo te hace perezoso y te lleva al fracaso

En el fondo lo sospechábamos. Pero ahora ya tenemos un estudio universitario a nuestra disposición para confirmarlo. Los hechos, no obstante, hace tiempo que nos lo confirmaban: los entusiastas de los libros de autoayuda, del pensamiento positivo, los lectores de Paulo Coelho, son demasiado a menudo, por decirlo de forma fina, aquellas personas con las que prefieres no compartir muchos ratos de tu vida.

Ahora la profesora de psicología de la  Universidad de Nueva York, Gabriele Oettingen, nos confirma que todo eso del buen rollo y el positivismo puede tener efectos devastadores. En concreto, según estudios realizados en Estados Unidos y Alemania, ha encontrado que las personas más confiadas en que su futuro será bueno, “tanto estudiantes que quieren una cita, pacientes que esperan un pronto restablecimiento o alumnos que confían en obtener una buena nota” tienen más probabilidad de fracasar en sus intentos. El ver el futuro de un excesivo color de rosa provoca que no realicemos los esfuerzos necesarios para conseguir nuestras metas.  Fantasear sobre nuestros futuros éxitos reduce la probabilidad de conseguirlos.

¿Por qué el pensamiento positivo no funciona como podriamos esperar?”, se pregunta Oettingem. Y responde:”tal y como mis colegas y yo hemos descubierto, soñar sobre nuestro futuro te sosiega, reduciendo la presión de la sangre sistólica, pero también drena la energía que necesitas para actuar y conseguir los objetivos que te has marcado”.

Una solución: sin caer en el pesimismo crónico, y soñando con objetivos positivos, asumir también los obstáculos con los que te vas a encontrar. Y de este modo distinguir entre objetivos alcanzables e irrealistas. Suena razonable.

En definitiva, que todo eso de los gurús del buen rollo, del no problem (o si lo prefieren el hakuna matata), de pensar en positivo siempre y de que si lo sueñas se hará realidad, es una mandanga que no resiste el mínimo análisis y que, de hecho, te lleva al fracaso y, probablemente, a consumir más libros de autoayuda para descubrir qué fue lo que falló. Pero lo que falló fue, precisamente, el creerte los libros de autoayuda.

Escriba un Comentario

Your email address will not be published. Required fields are marked *

*

You may use these HTML tags and attributes: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <strike> <strong>