Sin hijos no saldremos de ésta
Se habla mucho de crisis, agencias de rating, subida de impuestos o recortes. Pero pocos hablan del trasfondo demográfico de la crisis. Y habrá que hacerlo, pues si en el desencadenamiento de la crisis encontramos diversos factores, la cuestión demográfica es quizás la causa más importante a medio y largo plazo para explicar nuestra incapacidad para salir de ella.
Samuel Gregg, director de investigación del Acton Institute, acaba de abordar el tema en un artículo en el American Spectator titulado Europe in Demographic Denial, en el que recuerda que con tasa de fertilidad medias en Europa de 1,53 hijos (muy por debajo del nivel de reemplazo de 2,1) el estado del bienestar es insostenible.
Me ha gustado el concepto ratio de dependencia: relación entre jubilados y personas con un empleo. Las estimaciones dicen que en Italia, Alemania… y España ese ratio de dependencia se encamina en pocas décadas a dos trabajadores por cada jubilado. La imagen es clarísima y podemos imaginar a los dos atribulados trabajadores llevando en hombros al jubilado, tal cual lo sacaran en hombros de una plaza de toros.
Ante esta perspectiva se imponen cambios estructurales. El problema es que algunos países, como Suecia o la propia Alemania, empezaron estos cambios a principio de la década pasada. Nosotros estamos despertándonos ahora, Como casi siempre, llegamos tarde y habrá que hacerlo a lo bestia. Pobre España.
